Crítica los amantes pasajeros

 
 
 
Almodóvar vuelve a la comedia. Esto no es una sorpresa, ya que en las últimas semanas se ha dado mucho bombo a este hecho. Una película que ha dado mucho que hablar, y no precisamente bien. Las críticas están siendo muy feroces ante el director manchego, y yo como fanática de este director me sentía dolida ante unos comentarios tan incendiarios. Pero me quedé mucho más tranquila cuando vi la película y vale, no es su mejor film, y vale, reconozco que en ocasiones el guión es flojo. Pero, es una película que al fin y al cabo vende lo que es, una comedia muy al estilo Almodóvar, con una denuncia social escondida pero que al fin y al cabo está patente y de forma muy inteligente. La clase turista dormida mientras los problemas acechan en el avión mientras que el sector privilegiado permanece despierto sin hacer nada tampoco y se dejan impresionar por los espectáculos de unos azafatos muy peculiares. El número musical, que decir, a mí me parece realmente increíble y entretenido y las interpretaciones de Raúl Arévalo, Javier Cámara y Cecilia Roth para mí son increíbles, aunque nada sorprendentes viniendo de estos actores. Arévalo es el que más se ha superado, en un papel que nunca le habíamos visto y poco tiene que ver con los anteriores interpretados. Considero muy inteligente de esta misma forma el papel de Roth que nos recuerda a una Bárbara Rey y sus líos de pantalones con los altos cargos, me ha parecido una nota de humor muy inteligente.
 

 

Muchos más flojos encontramos el papel de Miguel Ángel Silvestre o el de Laya Martí que no aportan prácticamente nada a la película, por no decir nada. Y si nos centramos en el final, a mí sinceramente, no me ha gustado ese fin de la historia tan cogido con pinzas y en el que parece que después de hora y media de incertidumbre al final todo tiene una solución precipitada. Quizá lo que más me ha gustado es esa aparición de Blanca Suárez dedicándole una frase lapidaria a su ex novio Willy Toledo, tan propia de las mujeres dolidas creadas por Almodóvar.

En resumen, como ya he dicho anteriormente no me parece la mejor película del director, pero al fin y al cabo para los amantes de Almodóvar tiene todos los requisitos que nos gustan de sus peliculas, personajes llevados al extremo que se dejan llevar por sus pasiones, un guión sarcástico e irónico y locura mucha locura.
 

Carlos Areces: "Tarantino es uno de los directores que más admiro"

El Festival Cinema Jove continúa sorprendiéndonos y dejando que conozcamos a diversas personas fantásticas relacionadas con el mundo cinematográfico. Una de ellas es Carlos Areces, al que hemos podido ver en películas como «Balada triste de trompeta», «Spanish movie»y en programas de humor de Paramoun Comedy como «La hora chanante» «Museo Coconut», entre otros, que ha tenido el placer de recibir uno de los premios más importantes del festival: Premio Futuro de Cine, premio que anteriormente fue otorgado a actores consagrados y con una gran carrera cinematográfica como Elena Anaya, Silvia Abascal, Unax Ugalde, entre otros muchos. Es un premio que se da al actor que prometa una magnífica carrera en el cine. El pasado sábado tras el coloquio dónde se homenajeaba a Berlanda con los directores Santiago Segura y Óscar Aibar, Carlos Areces protagonizó una charla en la que con una gracia y humor que contagia, y una cercanía con la que parece que lo conoces de toda la vida comentó  como se sentía tras recibir este premio. Le acompañaban durante el coloquio los dos directores mencionados anteriormente, que ayudaron al actor a recordar anécdotas y alabaron su trabajo.

De izquierda a derecha: Óscar Aibar, Santiago Segura, Carlos Areces y Rafa Maluenda, director del Festival

«Que me vean con un futuro de cine es algo ambiguo…porque hay películas que acaban fatal como por ejemplo «Titanic» «, así comenzaba Carlos Areces el coloquio, dando una nota de humor incluso a sus primeras declaraciones. Sus compañeros no dejaban de alabarle: «Areces es el actor más importante y notable de su generación», afirmaba Santiago Segura durante el acto.

Areces, además, confesó su admiración hacía el director Quentin Tarantino («Kill bill», «Malditos Bastardos» «Pulp Fiction») y afirmó: «Si Tarantino me pide que me coma una mierda, yo me la como». El actor recuerda como uno de sus momentos más emotivos cuando Tarantino le felicitó por su interpretación de payaso en la película de Alex de la Iglesia «Balada triste de trompeta», «Estábamos en el Festival de Venecia y mientras se proyectaba la película había un tipo que no paraba de reírse y encima en las escenas más dramáticas, pronto descubrimos que ese señor era Tarantino y al día siguiente, en los premios yo pensaba que tenía que conocerle como admirador suyo que era, y al principio no lo conseguía porque estaba siempre rodeado de gente y de repente fue él quién se dirigió a mi y me reconoció como el payaso de la película, en ese momento no sé que me dijo porque me quede inmovilizado pero más tarde me dijeron que Tarantino me había alabado», recuerda Areces.

A lo que se refiere a trabajar junto a Alex de la Iglesia, el actor afirma que fue «algo muy importante y especial» para él. «Cuando se estaba forjando la película «Balada triste de trompeta», Álex me dijo que yo de payaso asesino debía estar muy bien y a partir de ahí cada dos por tres me contaba nuevas cosas por ejemplo, un payaso que llora cuando se ríen de el y poco a poco fue surgiendo mi papel en la película y no fue sólo comedia, sino que tenía también toques dramáticos y pasionales», explica el premiado.

De su paso por la película «Balada triste de trompeta», el actor recuerda sobre todo la dificultad de realizar algunas escenas por la falta de medidas de seguridad. «La película estaba planificada en 12 semanas y al final se hizo en nueve con materiales a veces insuficientes por lo que las medidas de seguridad eran escasas», recuerda el actor. «Antonio de la Torre era más valiente que yo. Recuerdo una escena en la que teníamos que trepar por la estatua del Valle de los Caídos, y yo no podía y en cambio él enseguida lo conseguía, y me sentía como el niño gordo del patio del colegio», comparte con humor.

Santiago Segura echa un cable a su compañero y amigo y afirma que trabajar con Alex de la Iglesia es en ocasiones un poco complicado. «Alex no es de improvisar pero siempre pide un nivel de dificultad con el que a veces te ves incapacitado», afirma el actor, «Carlos ha hecho grandes sacrificios por la película y le costaron mucho», continúa explicando Segura.

En cuanto a su paso por el mundo de la comedia con el cual aun está muy relacionado, Carlos Areces comenta que uno de los personajes «menos surrealistas» de los que ha interpretado en este ámbito es el de Bonico del Tó del programa «Muchachada Nui». «En la comedia me siento muy cómodo pero a la hora de la verdad lo que de verdad motiva es que los papeles te gusten, puedes estar menos preparado en una drama y que luego estés más cómodo de lo que imaginabas y no sentirme igual de bien en algunas cosas de la comedia», finaliza el actor.