Entrevista Julián Villagrán

Julián Villagrán está imparable. Tras protagonizar películas como Extraterrestre, Impávido o ¿Quién mató a Bambi? y ganar el Goya a Mejor actor de reparto por Grupo 7, ahora se pone en las manos de Chus Gutiérrez en su última película Ciudad delirio, que se estrenó hace unos días en cartelera. Un film sencillo, alegre y optimista donde Villagrán comparte cartel junto a la colombiana Carolina Ramírez e Ingrid Rubio. Julián, nos habla de Ciudad delirio, de su experiencia de rodar en Calí, y de sus próximos proyectos.

«Mi personaje tiene un patosismo encantador»


Julián Villagrán/  Foto: Amanda Gil



Es una película con muchas escenas de baile, con coreografías muy complicadas las cuales requieren mucho esfuerzo y aprendizaje. ¿Cómo ha sido este proceso de aprender a bailar y a moverte?

En cuanto llegué me pusieron un profesor de baile y también aprendí observando, yendo a garitos a los que me llevaba Chus (Gutiérrez) por Calí, conocimos un montón de sitios. Pero afortunadamente mi personaje baila mal, así que no lo tenía tan difícil.

Bueno, no creo que baile tan mal. Tiene su estilo.

Su patosismo encantador (risas)

¿Tenías conceptos anteriores de baile?

Sí, estudiando en la escuela de interpretación hice clásico y contemporáneo. También de niño bailaba break dance, he sido dj… He bailado mucho en mi vida pero nunca ritmos así más caribeños, como es la salsa, que es más sensual, tienes que coordinarte con una persona, mover las caderas, tienes que manejar porque es el hombre quién lo hace y eso es mucho más complicado.

Además estás relacionado con el mundo de la música, por ejemplo tocas la guitarra. Así que hacer una película de estas características en la que además se añade el baile habrá sido una añadidura más para tu carrera.

Sí, porque toda la vida he tocado la guitarra y he sido músico. Ahora tengo un grupo que se llama Nikaenen, el 18 tocamos en la sala Siroco un LP llamado La mano deKing Kong. Siendo músico ya me llamaba la atención la salsa y cuál es mi sorpresa que al llegar a Calí me enamoró completamente de este estilo. Ahora, a veces, lo escucho y bailo en mi casa . Me encanta.

Descubres un hobbie.

Sí, sí, totalmente.

¿Y qué tipo de música tocas con tu grupo?

Pop.

Actores de Ciudad delirio

A parte del baile, la experiencia de trabajar fuera, en Colombia, ¿cómo ha sido?

Esta fue una de las cosas que más me llamó la atención de este proyecto y el hecho de viajar a Colombia y conocer Calí que tenía muchas ganas. También me gustó el hecho de hacer de galán porque nunca me había visto así, ni me lo habían ofrecido y si lo hacen bienvenido sea.

¿Y Calí es realmente como se representa en la película? La gente tan optimista y vitalista…

Es una ciudad enorme. La zona en la que he estado es muy amplia y es totalmente segura y buen rollera. Hay muchos sitios para bailar, no es nada peligroso y luego tienes otras partes por las que no puedes ir. Pero bueno como en Sevilla que no entras a Las tres mil viviendas. Es cierto que existe esta zona en Calí y yo creo que es uno de los motivos por los que ha triunfado tanto esta película, siendo la más vista ahí este año. Ellos están acostumbrados, en el poco cine que tienen, a tratarse más la parte violenta, de narcotráfico, de muerte. En cambio esta película retrata algo mucho más blanco, más positivo, más colorista y más vitalista, que es algo muy real. Los colombianos celebran la vida cada día, también por la situación que han vivido. Se relacionan mucho a través de la música y el baile.

¿Anteriormente habías oído hablar de Calí? ¿Te sorprendió?

Tengo algunos amigos de Bogotá, otros de Barranquilla y de Medellín pero no había oído hablar mucho de Calí. Es una de las capitales mundiales de la salsa, que es más rápida que cualquier otra. El bar Delirio demuestra esto. Pero a mí sobre todo lo que más me gustaba era la vieja escuela, que son las personas más mayores, la música antigua y como ellos bailan. No es tan virtuoso pero tiene mucho amor, elegancia y estilo. Es lo que más me gustaba.

¿Qué tal trabajar con compañeros de fuera? Porque aquí en España os conocéis prácticamente todos pero cuando traspasas la frontera…

Me he llevado muy buenos amigos, he tenido una gran suerte con ellos. Carolina Ramírez es una compañera que me ha cuidado mucho, que ha estado muy pendiente de mí, Jorge Herrera, el señor mayor, también. Además, le conocía porque era muy fan de Betty, la fea y él hacía de padre. Para mí fue un placer.

Julián Villagrán y Carolina Ramírez en una de las escenas de la película


Llegamos a la conclusión que es una experiencia que repetirías.

Estoy deseando volver.

Tras la experiencia, ¿te gustaría trabajar en algún país en concreto?

En toda la Latinoamérica me gustaría. He hecho una película también en México y me gustaría seguir trabajando por ahí, la verdad.

A pesar de los problemas por los que pasa tu personaje, tanto profesionales como personales, a mí me da la sensación que se muestra muy optimista desde el principio. La prueba está en que llega a Calí y no tarda mucho en adaptarse.

Al principio le cuesta un poco entregarse.

Pero tampoco se hace mucho de rogar (risas)

Ya, digamos que pasa por un momento en que lo conoce y le encanta y el que también influye mucho el alcohol (risas). Pero, al principio, cuando todavía no ha bebido, le cuesta mucho bailar y no quiere. Dice que no sabe bailar que es un poco lo que nos pasa cuando llegamos ahí. Pero lo bueno, es una frase que se dice en la película que es: «Escucha tu intuición, siente la música y déjate llevar». Esto también puede trasladarse a la decisión de cambiar su estilo de vida.

¿Hay alguna anécdota del rodaje que te gustaría comentar?

Lo más bonito que me pasó creo que fue conocer a los niños, todas las escenas y ensayos con ellos. Era alucinante la vitalidad que tienen, lo agradables y risueños que son. Hubo un gran feeling tanto ellos conmigo como viceversa. Fue increíble.

Cambiando un poco de tercio, hace dos años ganaste el Goya. ¿Cómo ha repercutido esto en tu carrera?

Hombre, tampoco hay mucha diferencia, creo que igual ha influenciado en que estoy haciendo más protagonistas. Pero antes del Goya ya hice Impávido o Extraterrestre y en ambas tenía un personaje principal. Esto es una carrera de fondo, realmente.

Para terminar, ¿qué proyectos nos puedes adelantar?

He hecho una película hace un par de meses en la que he tenido un papel muy pequeñito, llamada Wild Oats con una producción norteamericana. En ella, he rodado con Jessica Lange y Shirley MacLaine. Ha sido una experiencia muy guay. Y luego otra película de Iñaki Lacuesta que se estrena en San Sebastián en Sección Oficial pero fuera de concurso que se llama Vivieron por encima de sus posibilidades. También llevamos a San Sebastián un corto dirigido por Paco Plaza y protagonizado por mí y por Maribel Verdú. Luego, hay otra película que no puedo hablar de ella.

Muchas gracias, Julián.

A vosotras.  

Os dejamos con el trailer y una foto de la directora con los actores.


Julián Villagrán, Chus Gutiérrez e Ingrid Rubio/ Foto: Amanda Gil




                                                                                                 Amanda Gil/Laura Alfaro
                                                                                                 @nuestraficcion @lauralpi                                                                                                                      @amandagil9